Una tensión arterial alta avisa de la existencia de unas arterias rígidas que no se expanden bien, lo que se asocia con un mayor riesgo cardiovascular. Cada vez es más habitual que quienes tienen hipertensión se controlen la tensión en casa y que aquellos que presentan el fenómeno de bata blanca también lo hagan. Este fenómeno de bata blanca se refiere a los pacientes que al tomarles la tensión el médico en la consulta o centro médico, les sube por los nervios, por lo que el resultado obtenido no es fiable. Y es que la medición de la tensión en casa es una herramienta para conocer el buen y mal control de la hipertensión y si además otros familiares lo emplean se puede detectar.
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Porque los hipertensos en tratamiento que se toman la tensión en casa pueden compartir con su médico esta información para tomar las decisiones más adecuadas sobre su enfermedad. Entre las ventajas de tomar en casa la tensión está que se evita la reacción de alerta o fenómeno de la bata blanca que se produce en entre un 20 por ciento y un 30 por ciento de los pacientes. Debes tener en cuenta que el tensiómetro debe estar validado por la Sociedad Española de Hipertensión. Aunque existen algunos dispositivos de muñeca validados, hay que tener en cuenta que un cambio en la altura de la mano puede modificar las mediciones.
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Y es que son los enfermeros los que se encargan de adiestrar a los pacientes en el uso de estos tensiómetros en casa según su perfil y necesidades. Se estima que un 50 por ciento de los hipertensos tiene mal controlada la tensión y que entre un 20 y un 25 por ciento de quienes tienen la enfermedad lo desconocen. A partir de los 40 o 45 años hay que acudir a consulta para tomar la tensión de vez en cuando y tenerla controlada. Para que esta medida de la presión arterial en casa sea fiable la persona debe hacerlo tres días a la semana, antes del desayuno y de la cena en dos ocasiones con un intervalo de un minuto entre ellas, en un ambiente tranquilo, con la temperatura adecuada y la vejiga vacía.